ROSE OVIEDO Todavía me quedan mil maneras de verte a los ojos, guardo todavía mil caricias en mis miradas, tengo guardadas mil razones que no entiendo y atrapan tu recuerdo cada vez que este quiere salir corriendo. Todavía guardo mil sobres para enviar las miles de cartas que llevan tu nombre, también tengo mil versos y ninguno de ellos me gusta tanto como el que sigue sin ser escrito O aquellos al q no le pongo nombre, el que no logra definir nada y no se siente culpable de encerrarte en palabras. Todavía me quedan mil canciones por cantarte a las tres de la madrugada. Todavía espero a veces a que tu voz me despierte y encendamos al mundo de su sueño nocturno para que la fiesta empiece. Todavía tengo tantas hojas secas esperando en un cuaderno, esperando a ser enviadas o esperando a morir por completo Sueño de ti, sueño infinito, tú sabes que te necesito y sabes cuanto te he esperado ya. Es como vivir en el exilio, como coautor del equilibrio, que n...